jueves, 16 de abril de 2009

En camino, siempre encaminado.





Rugoso cuaderno
tajada en mano, 
letra a letra, línea a línea.

Despoblado solar 
provocativo y burlón,  
sobre el carro y las teclas.
 
Oscuras líneas 
retozonas columnas, 
escarceos y perennes instantes. 

Meteoros y espejismos  
surcos de mis versos,
vivaqueando entre zaguanes. 

lomo de sirenas,  
pareados de luz y mar,  
vaivenes de la frívola rompiente.
 
Soledad de la cuadrícula 
miseria del deseo insaciable, 
liviana mortaja del tiempo ido.




Cantoblanco, Abril de 2009

El pozo, el brocal y el cubo

In memoriam Agustín Vento Retorna al pozo y a las tunas de pinceladas sueltas y a las relumbrantes mañanas, Con su brisa de pluma  y...