viernes, 23 de febrero de 2007

Escenas de una vida: juventud



José Vento Ruiz, 3 Julio 1925 – 16 Marzo 2005
Sit tibi terra levis




Tendido sobre los botalones, 
desmadejado y un punto ausente, 
como sólo la juventud admite,
contempla los irisados aceites
de la dársena trazar escamas 
de sierpe en la lustrosas aguas.

El cuerpo se acompasa a cada onda
en un vaivén adormecedor, mientras 
unas nervaduras de luz traspasan 
la superficie con un fulgor de estoque.

Así transcurren los días,
con lastimera untuosidad, 
hasta que el horror dispone, 
sobre la cruel ilusión
de las hazañas bélicas, 
la crueldad  y el absurdo
de un joven cuerpo amputado,
 del caz y la sangre 
que recorre el talud, 
de la bodega en llamas 
y la oquedad del monte 
que apenas les protege 
de los bombardeos asesinos.

Embózate de ingenuidad,
muchacho,
entre fragantes pinadas;
Admira los tonos
de las escurridas gredas
y deja que ramoneen
tus cabras sobre las lomas;
deja que la retina libe 
el blanco marfileño
de las alquerías lejanas;
arróbate al ver henchirse
de malva y anaranjados reflejos
el cañaveral atardecido.

Venera a aquel que reveló 
 la áurea proporción 
y las pacientes transparencias 
 de las veladuras, rememora 
el mirar risueño que guió tu mano, 
entre ventas y acequias,
combinando los ensueños
con los trazos con que invocar
el divino ritual del simulacro.





Madrid, Febrero 2007

Homenaje, Agustín Vento Villate (1962-2024)

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